WASHINGTON-CHICAGO-LOS ANGELES-BRUSELAS.- "La gente está profundamente frustrada con el ritmo de nuestra recuperación económica y las oportunidades que esperan para sus hijos y nietos", reconoció hoyel presidente estadounidense Barack Obama, y ofreció colaboración a los opositores tras el duro revés sufrido por su partido en las elecciones legislativas de mitad de mandato. "Como presidente -asumió- mi principal tarea es conseguir una economía fuerte y por ello tengo que aceptar la responsabilidad de que no hemos logrado los progresos que deberíamos".
Los republicanos John Boehner -próximo presidente de la Cámara de Representantes- y el líder del Senado, Mitch McConnell, dijeron que los votantes les entregaron un mandato. "Lo que tenemos que hacer es escuchar al pueblo estadounidense", dijo Boehner, que se mantuvo firme en pedir cambios a la controvertida reforma sanitaria, piedra angular de la legislatura demócrata. El Partido Republicano se hizo con la mayoría en la Cámara de Representantes -que estaba en manos de los demócratas- y sumó varias gobernaciones, aunque los demócratas retuvieron su dominio en el Senado. La oposición ganó los gobiernos de al menos 11 Estados que estaban en manos del oficialismo aunque el Partido Demócrata recuperó dos gobernaciones y mantuvo otro clave.
En su tierra, Chicago, Obama sufrió una derrota simbólica ya que el republicano Mark Kirk, de Illinois, ganó la banca en el Senado que había sido ocupada por el mandatario demócrata hace dos años atrás. En cambio, en California, el demócrata Jerry Brown ganó la gobernación y reemplazará al republicano Arnold Schwarzenegger.
La victoria republicana podría agudizar las divergencias entre Estados Unidos y Europa en importantes temas como la regulación financiera, el cambio climático, el comercio y aspectos de la política exterior. Obama podría volcarse a esta última como una forma de recuperar la popularidad después de una derrota que lo ha dejado debilitado en la política nacional y es probable que comience esfuerzos por reconstruir su imagen en el extranjero cuando empiece el viernes un viaje a Asia. (Dpa-NA-AFP-Reuter)
Los republicanos John Boehner -próximo presidente de la Cámara de Representantes- y el líder del Senado, Mitch McConnell, dijeron que los votantes les entregaron un mandato. "Lo que tenemos que hacer es escuchar al pueblo estadounidense", dijo Boehner, que se mantuvo firme en pedir cambios a la controvertida reforma sanitaria, piedra angular de la legislatura demócrata. El Partido Republicano se hizo con la mayoría en la Cámara de Representantes -que estaba en manos de los demócratas- y sumó varias gobernaciones, aunque los demócratas retuvieron su dominio en el Senado. La oposición ganó los gobiernos de al menos 11 Estados que estaban en manos del oficialismo aunque el Partido Demócrata recuperó dos gobernaciones y mantuvo otro clave.
En su tierra, Chicago, Obama sufrió una derrota simbólica ya que el republicano Mark Kirk, de Illinois, ganó la banca en el Senado que había sido ocupada por el mandatario demócrata hace dos años atrás. En cambio, en California, el demócrata Jerry Brown ganó la gobernación y reemplazará al republicano Arnold Schwarzenegger.
La victoria republicana podría agudizar las divergencias entre Estados Unidos y Europa en importantes temas como la regulación financiera, el cambio climático, el comercio y aspectos de la política exterior. Obama podría volcarse a esta última como una forma de recuperar la popularidad después de una derrota que lo ha dejado debilitado en la política nacional y es probable que comience esfuerzos por reconstruir su imagen en el extranjero cuando empiece el viernes un viaje a Asia. (Dpa-NA-AFP-Reuter)